jueves, 15 de septiembre de 2011

Crónicas de una mujer embotellada I


Sí, si , quien dice que ser ama de casa es empleo de tiempo completo tiene toda la razón, nada de "había una vez una dulce princesa", sería mejor "había una vez una tonta princesa", perdón quise decir "ingenua princesa", así es, pongamos como adjetivo "ingenua", que decidió ser parte de las convenciones de este mundo y de pronto cayó en la realidad de todo este meollo: Está dentro de una botella de vino tinto vacía ¿suerte? nada de eso, por lo menos si hubiese estado llena tendría con que olvidar y ahogar sus penas.

No sólo la botella está vacía, la boca tiene un corcho bien apretado, lo cual hace de su encierro una condena. 
(continuará..)